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Al menos 50 colectivos de organizaciones civiles presentaron una queja ante el Instituto Nacional contra la Discriminación contra el arzobispo de la diócesis de Oaxaca, José Luis Chávez Botello, a quien acusan de asumir acciones y conductas homofóbicas y discriminatorias durante sus actos religiosos contra la comunidad lésbico-gay.
El jerarca católico, tras encabezar el domingo la homilía en la catedral oaxaqueña, señaló: “Si un hombre y una mujer son limpios y honestos, jamás llegarían a convertirse en homosexuales ni lesbianas”.
La declaración del prelado despertó el enojo entre los integrantes de la Red Oaxaqueña por la Diversidad Sexual y diversos colectivos civiles, que catalogaron su postura como un ataque a su movimiento, sobre todo cuando iniciaron en Oaxaca una jornada contra la homofobia, que fue auspiciada por el gobierno estatal.
El presidente de la agrupación, Eduardo Liandro, estableció que la queja presentada fue de oficio y se espera que haya una multa o amonestación contra el jerarca católico.
“Lamentamos que la iglesia esté perdiendo sus principios humanistas y aproveche que en Oaxaca hay una laguna legal que deja en la impunidad las manifestaciones de odio”, señaló.
Liandro mencionó que el Congreso local reconoció el Día Estatal de Lucha contra la Homofobia, aprobado el 14 de agosto de 2008, mientras que el ayuntamiento de la ciudad de Oaxaca lo aprobó el 14 de mayo de 2008. “Sin embargo, ambos niveles de gobierno han olvidado realizar acciones necesarias para promover un estado libre de discriminación”, dijo.
La presidenta de la Comisión de Equidad de Género en el Congreso local, la panista Ivonne Gallegos, lanzó un pronunciamiento a favor de respetar la diversidad sexual en el estado y urgió a las diferentes fuerza políticas empezar a regular la ley para sancionar la homofobia y la discriminación de género.
Oaxaca / Óscar Rodríguez
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