martes, 12 de julio de 2011

COLUMNA "CIUDAD DE LOS PALACIOS"


Por Albert Campos  EL CAPITALINO
La cercanía de las elecciones ha puesto nerviosos a muchos políticos que están en el trapecio debido a que velan armas para saltar a la siguiente “chamba”. Es más, hasta los que no están en este momento al escrutinio de la opinión pública han empezado a hacer su tarea como es el caso de la ex delegada en Cuauhtémoc, Virginia Jaramillo, quien a lo largo y ancho de la demarcación ha colocado sus mantas donde habla de sus logros pasados y presentes.
Asegura la susodicha que toda la comunidad de la “dele” la aprecia y que por lo tanto ella puede ser la abanderada para suceder al actual Jefe Delegacional, Agustín Torres Pérez, desgraciadamente para Jaramillo Flores su pasado la condena.
Este personaje, cuando despachó y tuvo la oportunidad de estar en el edifico de Aldama y Mina como la mandamás no hacia presencia en sus oficinas, se la pasaba paseando por gran parte del mundo a costillas del erario local, los eventos a los que convocaba eran superficiales olvidando así su origen del esfuerzo y del trabajo.
Más también, Virginia Jaramillo no habla o deja constancia en sus promociones de cómo utilizó a la Cuauhtémoc como botín económico, es decir, el número de familiares que colocó en puestos estratégicos durante su mandato e incluso una de sus sobrinas todavía queda viva en la estructura de la Delegación bajo el mando de Alejandro Fernández, actual Director General de Desarrollo Social, quien la mantiene congelada debido a que no sabe hacer nada.
Qué pronto olvidó la ex delegada sus broncas conyugales con el hoy diputado local José Luis Muñoz Soria, lo que origino grandes problemas en el rumbo de la Delegación y su entendimiento con su pareja sentimental Guillermo Orozco Loreto, sobre todo en el caso de la estación de bomberos Ave Fénix cuando se dio el robo de varias obras de arte y que incluso algunas eran del actual Jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard.
Por cierto, se asegura que el actual Jefe Delegacional de la Cuauhtémoc, Agustín Torres Pérez, tiene definido su rumbo político para el otro trienio debido a que en sus planes está ser el próximo Secretario de Desarrollo Social debido a que su perfil ha sido y será el apoyar y dar transparencia a los dineros destinados para este fin.
Agustín Torres Pérez es un hombre de trabajo al que le gusta salir a la calle con el fin de conocer lo que realmente sucede en la demarcación que gobierna, le agrada escuchar tanto en asambleas vecinales como recorridos por las 33 colonias a la gente para dar respuesta inmediata a las peticiones de los vecinos.
Y si no llega, se queda con una diputación local pero eso sí en una buena Comisión para no ser un levanta dedos solamente.
Quien también hace ruido en el PRD nacional, es Diana Sánchez Barrios quien con el grupo que encabeza de mujeres transexuales busca cosechar el voto con miras a un lugar en el recinto de Donceles y Allende.

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